Estramoni y la cambra de tardor
La verdad es que siempre tengo muchas reservas ante una novedad, entre otras razones porque la edición constante de música es tan brutal que es imposible de absorber. Por eso a menudo me protejo manteniéndome por los márgenes ya que lecturas rápidas y audiciones accidentadas no son mi fuerte. Prefiero la calma y el ir haciendo con la línea que tengo trazada. Sin embargo, en un caso como éste, en el que un buen amigo me trae un CD, me paro; lo desprecinto y antes de escucharlo me miro el librito, los créditos y todo lo que puedo encontrar.