PRO-GRA-SSIU

  • Posted on: 18 May 2014
  • By: admin

Jornada de análisis, memoria i recuperación del I Festival de Música Progresiva de Granollers

Oriol Serra dio la bienvenida a los asistentes. Para empezar , se proyectaron dos películas. La primera de ellas estaba protagonizada por el periodista Karles Torra y el músico Emili Baleriola en la que 41 años después llegaban al escenario donde se hizo el Festival y viajaban a ese instante. La segunda cinta contenía las imágenes en súper8 que Jordi Batiste había grabado de manera doméstica durante su paso por el Festival. Éstas, tenían un doble valor, primero el histórico y después el de ser las únicas imágenes en movimiento que de momento se han encontrado sobre el Festival.

La segunda parte de la jornada constó de una conversación, mesa redonda o como se quiera decir sobre lo que fue el Festival y por extensión, todo lo que pasó en Granollers durante aquellos años, durante los cuales la capital vallesana se erigió como núcleo cultural del rock y la psicodelia. Entre los participantes estaba Karles Torra que narró lo que pasó aquellos años, Emili Baleriola que en ese momento estaba en Máquina! y tocó en el Festival, Jordi Batiste que asistió como público, Miguel Ángel Núñez que tocó en el Festival con Tapiman y Manel Joseph, hombre que estaba siempre en todas las salsas y que asistió al Festival de público ya que al igual que Batiste estaba realizando el servicio militar. Es imposible resumir todo lo que se dijo, no obstante, si que hay algunos puntos que vale la pena destacar, o al menos, mencionar .

Detalle de uno de los expositores con material relacionado (Fotografía de Oriol S.)

Karles Torra hizo una exposición brillante, muy bien documentada en la que aportó datos y anécdotas que hasta día de hoy no se conocían. En primer lugar destacó el trabajo llevado a cabo por el CIT, auténtico motor de lo que ocurrió durante aquellos años, remarcando el papel del reportero JIM como cabeza visible, aparte de Santi Guix y Joan Lacueva entre otros. Guix, el año anterior había estado en el isla de Wight, la inspiración para montar el Festival de Granollers. Aparte del Festival de Granollers, Torra destacó diferentes eventos que pusieron Granollers como punto neurálgico del rock y la cultura underground de aquellos años. Entre estos: El estreno mundial de Dioptria de Pau Riba en el desaparecido Dingo tras la negativa del Palau de la Música de Barcelona y la respuesta en forma de “botifarra”; la I Muestra Internacional de Arte - Homenaje a Joan Miró; las matinales de rock progresivo en la Bodega Bohemia; el concierto de Soft Machine y Canarios; el doble concierto de King Crimson y como colofón final, el Happening colectivo celebrado en la plaza de la Porxada con Salvador Dalí de maestro de ceremonia.
Sobre el Festival, Torra destacaba la participación y ayuda estratégica en los contactos internacionales que aportó Oriol Regàs y la valentía del entonces alcalde de la ciudad Francesc Llobet. El Festival se hizo sin permiso gubernativo y Llobet asumió la responsabilidad. Este detalle llamó mucho la atención entre los asistentes, dado el componente de compromiso y de riesgo de un acto tan alternativo en plena dictadura de Franco. En el apartado Family, Torra explicó varias anécdotas curiosas. En un principio se pensó en un grupo que entonces comenzaba a funcionar y que eran los Pink Floyd, pero se descartó por su elevado precio, un millón de pesetas. También se pensó en Donovan, pero también tenía un precio prohibitivo. Pretty Things no podían por temas de agenda. Fue Santi Guix, que había visto triunfar a Family en Wight, que los propuso. Además valían cien mil pesetas, un precio asumible. El problema vino cuando se contactó con los Family. Era muy difícil reunirlos porque entonces estaban de vacaciones cada uno por su lado. A pesar de todo se hicieron los trámites y se envió el dinero, un dinero que se perdió por el camino y no llegó a manos de los Family. Se tuvo que volver a enviar. A todo este curioso relato, el avión de los Family se retrasó y llegaron mucho más tarde de lo esperado. Es por eso que tocaron dos o tres horas después y ante la espera impaciente del público, una vez el festival ya había terminado. El emisario y hombre de enlace con Family terminó encerrado en el "cuartelillo" de la Guardia Civil. Eran otros tiempos, por ejemplo el hospital de Granollers no aceptó ninguna persona intoxicada y tuvieron que ser trasladados a hospitales de Barcelona. Como el Festival coincidió con la feria de Granollers, a las 2 de la madrugada durante la actuación de Màquina! hubo un momento muy curioso cuando apareció el entonces Presidente de la Diputación Joan Antoni Samaranch y una comitiva de hombres de frac a pasear por el recinto de Palou. En cuanto a los números, 4500 personas según el Diario de Barcelona, el primer gran Festival al aire libre realizado en España y como destacaba Torra partiendo de grandes cronistas de aquella etapa como Claudi Muntañá y Pau Malvido, el primer gran " Trip " colectivo y viaje psicodélico realizado en nuestras tierras , que de alguna manera cambiaría la escena musical de aquella España gris. Posteriormente vendrían: Burgos, Canet, Sallent ...
Emili Baleriola aparte de explicar algunos datos interesantes y curiosos sobre toda aquella etapa destacó que el Festival marcó un punto de inflexión. Comentaba, con la complicidad de Batiste, Núñez y Joseph, que entonces no era como ahora y que el simple hecho de llevar el cabello largo y hacer de músico ya era un grave problema. La gente te insulta por la calle, muchas mujeres cuando pasaban por tu lado se santiguaban y más de una y dos veces los obreros de la construcción encima de los andamios les increpaban y tiraban piedras. A todo esto, la lucha con la familia. El Festival fue una inyección de moral y de seguridad personal con todo lo que querían hacer y tirar adelante. “Hasta la consecución del mismo uno estaba convencido de lo que hacía pero tenía la sensación de que le acompañaban cuatro gatos y que siempre eran una minoría que los seguía y que vestía y pensaba como ellos” apuntaba Baleriola. El Festival demostró que no eran cuatro gatos, sino que por primera vez se vio que miles de personas compartían esa manera de hacer y sentir. Baleriola aseguraba que el Festival, junto con la semilla plantada en el Primer Festival del Iris fue un revulsivo importantísimo en este aspecto e inicio de todo lo que seguiría hasta el día de hoy. Jordi Batiste hizo especial énfasis en el hecho de que en nuestro país se pudiera ver actuar un grupo como Family. Para él, fue la primera vez que vio una formación de estas características. Entonces este tipo de grupos no se veían en nuestro territorio, salvo contadas y puntuales ocasiones en lugares como las islas Baleares. Pero todo el mundo sabe, que las islas Baleares eran otro mundo. " Ver llegar un grupo como Family, con su propio equipo de sonido y una puesta en escena y una fuerza en el escenario impactante cambió nuestra manera de ver la música en vivo" afirmaba Batiste .
Miguel Ángel Núñez era un testigo de excepción de aquella jornada. Como hemos dicho tocó en el Festival con Tapiman pero a la vez el año anterior había estado en la isla de Wight. Es decir, viendo a Hendrix, The Doors... Y vio a Family en Wight y una año después coincidiría compartiendo cartel en Granollers. Sensaciones muy diferentes. Núñez puso sobre la mesa un aspecto en el que todos sus compañeros coincidieron, la falta de infraestructura de entonces, donde se hacía todo con mucha fuerza, ganas y convencimiento pero en el momento de tocar en directo no había ningún seguridad ni infraestructura. " Se tocaba prácticamente a pelo, sin monitores, muchas veces tenías calambres porque nunca había toma de tierra... La tecnología era muy escasa ". Núñez recordaba la anécdota de cuando Toti Soler llegó de Londres con un pedal para la guitarra eléctrica y todo el mundo flipó. Y entre risas provocados por la perspectiva del tiempo, los problemas con la policía, el hecho de ir a un concierto y que te aparecieran en la sala, te esperaran para registrarte, cogerte los datos... Manel Joseph, el hombre que siempre está y estaba en todas las salsas y uno de los artistas más polifacéticos e históricos de nuestr o país coincidió con sus compañeros aportando datos y anécdotas a todo lo que iban comentando, aparte de ser un testigo de lujo del viaje lisérgico que realizaron cientos de personas durante el Festival.


De izquierda a derecha: Àlex Gómez-Font, Karles Torra, Emili Baleriola, Jordi Batiste, Miguel Ángel Núñez y Manel Joseph (Fotografía de Oriol S.)

En cuanto a las actuaciones musicales de la jornada, se dividieron en dos partes. En primer lugar actuó Emili Baleriola en formato cuarteto. Entre su banda de acompañamiento, una novedad destacada, el teclista Jordi Soley que debutaba por primera vez con la banda de Baleriola y que supo ambientar y captar a la perfección la esencia y la música de Baleriola. Para los que no lo tiene controlado , Soley es uno de los históricos de la escena musical del país: Teclista de la primera Companyia Eléctrica Dharma y productor y músico de proyectos interesantísimos como el que lleva a cabo Víctor Bocanegra. En directo, Baleriola crece encima del escenario y actualmente está en un estado de gracia único. Tiene la medida justa, no se pierde en virtuosismos, lleva un sonido que le hace original y diferente y desgrana un jazz- rock que llega a toda clase de públicos sin complejos. Como comentábamos con Karles Torra, resulta evidente que cuando lo vives en directo, te das cuenta de que te encuentras ante uno de los gigantes de la guitarra eléctrica del jazz- rock estatal. Personalidad, convencimiento , humildad y un trabajo cuidadoso que dan como resultado un guitarrista en peligro de extinción en una escena en la que la mayor parte se ha perdido en diálogos inacavables con ellos mismos, virtuosismos, y un jazz incomprensible alejado del gran público y que mira para ver quién la tiene más grande.
Aparte de hacer su repertorio, Emili Baleriola nos concedió momentos muy dulces de su etapa en Máquina!. Por un lado la excelente versión que hizo del mítico tema "I Believe" de Josep Maria París. Una versión que pasó pe su filtro pero que en todo momento conservaba el tono y la esencia del maestro París. La otra guinda del pastel fue "All right under the rain ", una canción de la segunda Máquina! escrita por el mismo Baleriola y en la que lo acompañó en el escenario otro histórico de la guitarra , Miguel Ángel Núñez y cantó Jordi Batiste. Un Jordi Batiste que ya la había grabado para el mítico Máquina ! En directo de 1972. Me llama mucho la atención ver a Jordi Batiste cantando este tema, es curioso observar cómo se transforma y toma una fuerza y una dimensión sorprendentes.

Emili Baleriola Jazz-Rock Quartet en escena (Fotografía de Oriol S.)

La última parte de las actuaciones musicales estuvo protagonizada por Jordi Batiste, que presentaba su último proyecto, Nova. Un puñado de buenas canciones apoyadas en el rock más crudo y fresco en formato trío. Parece que Batiste vuelve al lenguaje que desarrolló con Máquina! y Ia & Batiste pero con una construcción más contundente y directa. Tengo la sensación de que Batiste está en un buen momento, sin complejos y con potencia. Como era de esperar, él también nos obsequió con una mirada a parte de su extensa y basta carrera destacando el guiño a Ia & Batiste, con una tierna versión de " Sifon " o el recuerdo de Els Tres Tambors. En directo, la fórmula de trío con el excelente Jesús Molina a la guitarra y Marcel Batiste a la batería funciona a la perfección En algunos temas les apoya Adela Batiste a las voces.

Jordi Batiste i Nova en escena (Fotografía de Oriol S.)

Para terminar la jornada, todos los músicos participantes subieron al escenario para interpretar el mítico "Why?".